S. Pablo escribió: “Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres. Que vuestra alegría la conozca todo el mundo" (Flp 4-9). La alegría nos permite, por tanto, enfrentar los desafíos con una perspectiva diferente, sin eludirlos.Compartir es conectar con los demás, tener algo en común. Nosotros lo que compartimos son valores evangélicos al estilo de Madre Rosa Ojeda, y nuestra manera de relacionarnos impacta positivamente en la vida de los demás.